¡Hola a todos y todas! Esta vez True Surfing te trae un cursillo avanzado del mundo FIXIE y su entorno. A lo largo de este post hablaremos sobre el concepto de FIXIE, su historia, su configuración y mucho más. ¡Bienvenid@s!

¿Qué es una FIXIE?

Una FIXIE es una bicicleta de piñón fijo, marcha única y que generalmente no lleva frenos. Esto último es necesario aclararlo, ya que la configuración de la FIXIE consta de freno contrapedal, más la posibilidad de añadirle frenos adicionales (normalmente delanteros mediante maneta).

Además, el mecanismo es muy sencillo: la rueda trasera, la cadena y los pedales están interconectados. Que fácil, ¿verdad?. Una pequeña ventaja o desventaja (según queramos ver) es que, al estar en movimiento la bicicleta, también estarán en movimiento nuestras piernas (a no ser que estemos totalmente detenidos).
Así, obtenemos una bicicleta muy sencilla y ligera, ya que nos libramos de todo extra o complemento, dejando atrás todo tipo de tecnología y volviendo a los principios (return to the classics). Y es esta sencillez y ligereza la que ha hecho de la FIXIE un movimiento (quizás moda) que ha irrumpido con mucha fuerza en el mundo del ciclismo.

 ¿Y su origen?

Podemos situar su origen en las calles de Estados Unidos, donde los trabajadores (generalmente repartidores) buscaban un transporte sencillo y ligero, sin muchos alardes, que fuera capaz de ir del punto A al punto B lo más rápido posible. Esta forma de transporte empezó a gustar mucho, tanto que muchas personas llevaron este movimiento más allá de las fronteras estadounidenses.
En la actualidad se ha generado un movimiento muy fuerte, llegando a crear una cultura ciclista que se afianza con el paso del tiempo.

 ¿Restaurar o no restaurar?

Seguramente os haya pasado por la cabeza esta cuestión. Son muchos los ciclistas que se animan en proyectos personales, restaurando cuadros viejos de bicicletas antiguas, terminando a veces con un resultado muy positivo. Puede parecer un proceso simple debido a la ya comentada sencillez y ligereza de las FIXIE, pero en la realidad vemos que:
♦ Se trata de un proceso complicado debido a la multitud de fases que debemos llevar a cabo. El cuadro debe estar totalmente limpio, debe ser lijado para eliminar restos de óxido, debe ser pintado, etc. Puede resultar un procedimiento tedioso y al que dedicar mucho tiempo.
♦ A veces encontrar las piezas exactas que deseamos no es una tarea fácil.
♦ La falta de tiempo puede llevarnos a que desistamos en el intento.
♦ El precio quizás puede ser un impedimento.
Igualmente, ni mucho menos estamos desanimando a esas personas que optan por la restauración. Más bien, lo que se pretende con este apartado, es dejar una pregunta abierta, deseando que nos contéis vuestras experiencias y vivencias.

¿Restauramos o empezamos con una bicicleta FIXIE configurada desde cero para nuestro gusto?.

 Ventajas y desventajas

Como en todo, existen elementos a favor y en contra de las FIXIE. En este apartado analizamos las ventajas y desventajas de las mismas.

VENTAJAS

La principal ventaja de las FIXIE es su sencillez, debido a que no se cuenta con ningún tipo de tecnología: es una bicicleta en su máximo esplendor. El piñón fijo nos permite que toda la fuerza ejercida por el ciclista sea transmitida a las ruedas directamente. La sencillez, en este caso, es sinónimo de ligereza al no contar con muchos extras que nos aportan peso. Igualmente, al contar con menos extras y/o componentes, realizar cualquier tipo de mantenimiento/conservación será tarea fácil. Por otro lado, son bicicletas muy “atractivas” debido a que se ven muy limpias.
Otro punto a favor, quizás más hedonista, es que al transmitir directamente la energía hacía la bicicleta, podremos sentirnos más unidos a este medio de transporte y fundirnos con el asfalto. ¿Demasiado poético?

DESVENTAJAS

Los problemas que podremos encontrar a la hora de elegir una FIXIE son:
♦ Algunas personas pueden pensar que el sistema de freno contrapedal es peligroso.
♦ Es necesaria cierta habilidad con este tipo de sistemas, aunque siempre se puede añadir un freno delantero con maneta.
♦ Las cuestas son una gran dificultad.
♦ La sencillez puede asustar.

 Partes de una FIXIE

En este apartado hablaremos de las partes que componen una bicicleta FIXIE. ¡Empezamos!

• CUADRO: el esqueleto de nuestra bicicleta FIXIE. Imprescindible. Sobre él, montaremos toda la estructura de nuestra FIXIE. En este tipo de bicicletas, suele tratarse de un cuadro limpio y sin ningún tipo de cableado o extras (el cuadro a pelo, vaya). Puede ser de acero, aluminio o carbono. Es necesario prestar atención a su peso y su tamaño a la hora de configurar nuestra bicicleta.

• SILLÍN: necesario para nuestra comodidad, y es que nuestro “culete” nos agradecerá elegir un sillín adecuado. Existen sillines de muchos materiales, más blandos o más duros, con mil formas y colores distintos. Lo mejor es ir probando hasta encontrar el sillín de nuestros sueños.

• RUEDAS: conjunto formado por el buje, el radio, la cubierta y la llanta. Una vez más, las posibilidades son inmensas. Podemos tener las partes de nuestra rueda de cualquier color y en variedad de tamaño según nuestras necesidades.
  • Mención especial recibe el buje flip-flop. Estos bujes, al tener dos piñones (uno a cada lado de la rueda) nos dan la posibilidad de tener una bicicleta “híbrida”. ¿A que nos referimos? A que, según el lado de la rueda que utilicemos, podremos tener piñón fijo (fixie) o piñón libre (single-speed). Así, tan sólo debemos cambiar la rueda de posición según el estilo que nos interese.
  • Las ruedas pueden ser de radio o ruedas de aspas, entre otros modelos.

• MANILLAR: cada manillar es un mundo, y es que existen muchos estilos y formas, según nos convenga para el uso y finalidad que se le dé a la bicicleta. Los manillares, además, pueden ser recubiertos por cintas especiales o por puños, dándoles un toque más estético y seguramente añadiéndoles un plus de comodidad. Destacamos 4 estilos, que se diferencia según su uso y forma:
  • Manillar doble altura
  • Manillar recto
  • Manillar pista
  • Manillar Bullhom

• CADENA: parte elemental en la transmisión del movimiento de nuestras piernas a la rueda. Al contar normalmente las bicicletas con buje flip-flop, se trata de cadenas especiales para piñón fijo y single-speed. Una vez más, la gama de colores y modelos (según calidad y material)  es amplía. La cadena requiere estar muy bien tensada, por lo que es preciso realizar ajustes continuos.

• PEDAL: los pedales más comunes son los pedales simples (los de toda la vida) y los pedales de plataforma.

• BIELA Y PLATO: nos ayudarán a transmitir el movimiento, con la ayuda de la cadena, hacia la rueda trasera. Es necesario tener en cuenta el numero de dientes del plato, así como su longitud.

 Configuradores FIXIE

Existen en el mercado un sinfín de configuradores donde podemos construir nuestra FIXIE desde cero, incluyendo los elementos que queramos y con el estilo que deseemos. En True Surfing contamos con nuestro propio configurador, que os ayudará a ver un modelo previo de lo que será la bici Fixie de vuestros sueños.

Os invitamos a que le echéis un vistazo y nos dejéis vuestras impresiones. Aunque se trata de un prototipo muy avanzado, aún se necesitan pulir varios aspectos. ¿Que cambiaríais?, ¿echáis algo en falta?.

Dejarnos vuestros comentarios, estaremos encantados de leerlos. ¡Muchas gracias a todos!

Podéis seguir todas las novedades de True Surfing en Facebook o en Instagram.